Dependiendo de la raza, las necesidades de ejercicio y cuidado del pelaje varían; hay perros que necesitan grandes cantidades de ejercicio y hay otras que son más sedentarias, las razas de pelo largo necesitan mucho más cuidados, como cepillado y visitas periódicas a la estética; a diferencia de una raza de pelo corto, el mantenimiento del pelaje es mucho  más sencillo, ya que no requiere corte del pelaje. Otras de las cosas que se deben considerar es si se quiere una mascota para niños, para personas mayores o un perro familiar, uno que sea de un solo dueño o un perro para guardia y protección, todos serian diferentes.

 

También hay que considerar si vivimos en un departamento o en una casa, ya que hay perros que suelen vocalizar (ladridos y aullidos) más que otros y las necesidades de espacio de cada raza son diferentes, podemos tener prácticamente cualquier raza en ambos tipos de vivienda, siempre  y cuando cubramos sus necesidades de ejercicio y alimentación, para con esto evitar problemas de comportamiento.

 

 

Para elegir el sexo del perro debemos tener en mente que las hembras son más limpias, cariñosas y presentan celo cada 6 meses (pueden llegar a ser agresivas con otras hembras antes, durante y después del celo, algunas hembras al estar en esta etapa fisiológica pueden llegar a marcar el territorio para permitir que los machos las detecten); los machos en cambio, son un poco más independientes, suelen ser más territoriales por lo que realizan marcajes con orina alrededor de su lugar de descanso (casa) , son más protectores y cuando una hembra esta en celo la pueden llegar a detectar desde 15 kilómetros a la redonda (lo que puede aumentar el marcaje, vocalización, agresividad hacia otros machos y disminuir el apetito).

 

Una vez que consideramos estos aspectos tenemos que tomar en cuenta que todas las mascotas pueden enfermarse y que las necesidades de los cachorros son mayores a las de un perro adulto. Un cachorro necesita mucha más atención y paciencia que un adulto, ya que a estos hay que enseñarles el lugar designado para que vayan al baño, el requerimiento de juego y sueño son mayores, necesitan más visitas al médico veterinario y las alimentos de cachorro son más caros. Es importante recordar que los cachorros exploran el mundo por medio del hocico y la nariz, por lo que un cachorro tiene que estar bajo supervisión 100% del tiempo mientras este explorando, para evitar que destruyan objetos o que  vayan a tragar algo que pueda poner en riesgo su vida, si no lo pueden supervisar lo ideal es hacer un corral qu8e cuente con una superficie diferente al resto de la casa, en la que el cachorro pueda orinar y defecar, que se le coloquen juguetes específicos para cachorro y este mantenga su mente activa, una superficie cómoda para que pueda descansar (cama) y plato con agua; si seguimos estas medidas, reduciremos el riesgo de que la salud del cachorro se vea comprometida.

 

Cuando tenga un cachorro las visitas al médico veterinario son importantes para mantenerlo en un buen estado de salud. Un cachorro necesita de varias vacunas para quedar protegido, por lo que no debe salir a lugares como la banqueta que está afuera de la casa o parques públicos para evitar que adquiera enfermedades como el moquillo o parvovirus. Las desparasitaciones son otro aspecto que hay que considerar para evitar que el cachorro tenga problemas de desnutrición, anemias y alergias; existen dos tipos de desparasitación y ambos son importantes. La desparasitación externa nos ayuda a controlar  y evitar problemas de parásitos externos, como lo son las pulgas y garrapatas, estos son ácaros y pueden transmitir diferentes enfermedades y otros paraisitos al cachorro. La desparasitaciones internas nos ayudan a mantener una carga parasitaria baja y con esto evitamos enfermedades sistemáticas como la anemia.

 

Una buena alimentación también es importante para que el cachorro crezca de forma adecuada, actualmente existen diferentes marcas y variedades de alimento, contamos con alimento para cada etapa de vida  (cachorro, adultos, geriatras), especiales para algunas razas, específicos para diferentes padecimientos (como la diabetes, sobrepeso y problemas cardiacos o renales) y para perros de alto rendimiento. Dentro de estas variedades contamos con alimento para perros de razas pequeñas, medianas, grandes y gigantes; esto se debe a que las necesidades de cada raza son distintas. Si damos el alimento adecuado dependiendo la edad y tamaño del perro podemos evitar muchas enfermedades del desarrollo como la displasia de cadera en razas grandes.

 

Al tener una mascota somos responsables de su reproducción; la esterilización de nuestro cachorro es otro tema a contemplar, por lo general, al adquirir un cachorro no sabemos si queremos cruzarlo, pero si debemos pensar en esto, ya que al realizar esterilizaciones de forma temprana (antes de la madurez sexual) podemos prevenir problemas de salud como tumores de glándula mamaria, tumores en testículos y en hembras infecciones en útero (piometra). Con esto también evitamos gestaciones no deseadas, que orinen por marcaje y mantenemos el comportamiento del cachorril.

 

Cuando nos entreguen al cachorro tenemos que preguntar algunas cosas básicas para no cambiar su rutina de golpe y con esto evitar se enferme o deprima. ¿Qué está comiendo? ¿Tiene alguna vacuna? ¿Esta desparasitado? ¿Cuáles son sus horarios de comida? Y ¿ha tenido algún problema de salud? Con estas preguntas tendremos la información básica para que al visitar al médico veterinario este pueda tomar las decisiones que considere adecuadas para el cachorro.

 

Cuando un cachorro es separado de la madre y cambia su ambiente se le genera cierto estrés, es importante entonces supervisar de cerca al cachorro los primeros ocho días, ya que el estrés genera baja de defensas (inmunosupresión), lo cual puede permitir se desarrollen enfermedades, que el cachorro no responda adecuadamente a las vacunas y/o que el apetito se vea afectado.

 

Antes de que llegue el cachorro a casa debemos tener todo preparado: una cama, platos, collar, correa e incluso haber pensado en los probables nombres para la nueva mascota. Así evitamos contratiempo y recibimos al cachorro de forma adecuada en el hogar. Con estas medidas el cachorro se sentirá bienvenido en casa disminuimos el estrés que el cambio de hogar le podría generar.